Artículo cedido por nuestra autora Natalia Demidoff.
Os ha gustado el título, ¿verdad? Y lo habéis leído de un tirón?
Quizás algunos ya saben de que se trata. Otros (los que tienen conocimientos de griego) han desglosado las palabras en términos más conocidos, como son fobia, deca y hexa. Para los que todavía se quedan perplejos, añadiré que mi idea era hablar de diferentes supersticiones ligadas a números, como el nº13 y el nº 666; también que existe la tetrafobia (¿verdad que es más fácil de interpretar?).
El número trece es uno de los que más sospechas despiertan sobre posibles desgracias.
La versión más difundida lo relaciona con la Última Cena en la que Jesús y sus discípulos eran trece y murieron dos durante los días siguientes. La elección de los martes y viernes asociados al trece según los países es menos evidente. Los viernes en recuerdo de la crucifixión de Jesús y los martes, quizá por la caída de Constantinopla.
Ya que he empleado palabras tan técnicas, diré que la fobia al martes 13 es la trezidavomartiofòbia pero que la de los viernes es peor: paraskevidékatriafòbia. Nosotros tuvimos dos Martes funestos mientras que nuestros vecinos nos ganaron con tres viernes. Y el Costa Concordia naufragó en enero un viernes 13.
Salvo el día, hay otras teorías sobre el trece. La imaginación se dispara …
Si los Mayas tenían un culto al 13 (fases de la Luna), de este lado del Atlántico preferían el 12, considerándolo como número de equilibrio: las doce tribus de Israel, doce signos del Zodiaco, doce horas , doce meses, los doce trabajos de Hércules. En la mitología escandinava, Odín organizó una comida. Eran doce en la mesa cuando se presentó Loki, dios de la guerra (¿lo vistéis en la película «Los vengadores» haciendo de malo, muy malo?), con la subsiguiente trifulca que terminó con la muerte de uno de los invitados. Conclusión: nunca ser trece en la mesa.
Todo el mundo sabe que algunos edificios no tienen 13ª planta, que se omite el lugar 13 en las carreras y hay más ejemplos de triscaidecafobia.
La hexakosio… etc. se ocupa del núm. 666, número de la Bestia en el Apocalipsis. Se explotó en películas de terror. Los hexaksio…fóbicos tratan de evitar cualquier relación con este número, que sea un edificio de una calle e incluso fracciones como 2/3, 8/3, 11/3 porque aparece un 6 periódico.
¡Imaginaos el pánico de esta gente el año 2006 con el 6 de junio = 06-06-06!
Como curiosidad Ronald W. Reagan era hexa…fóbico y sus nombres (la W es de Wilson) tenían seis letras. Cuando se fue a vivir a Los Ángeles pidió cambiar el núm. 666 de su residencia por 668.
Y los orientales (China, Japón, Corea…) se decantan por la tetrafobia. No porque sea más corta la palabra sino por la semejanza de como pronuncian su palabra «muerto». También suprimen la cuarta planta cuando es factible y Nokia evita poner el núm. 4 a los modelos de móviles dedicados al mercado asiático.
¿Cuál es su número de suerte o de mala suerte? ¿Occidental u oriental? Puede elegir.
*Hipopotomonstrosesquipedaliofo
Natalia Demidoff, autora de Azul y Gris