«Imagino que el arte no surgió para cambiar el mundo, el arte sirvió para escapar de la locura. Cuando el homo sapiens inventó el crimen, y en vez de desecharlo, lo
cultivó y lo sofisticó, nació la música, la pintura, la lírica, la danza. Fue una vía de escape ante el horror del asesinato, el robo, la guerra, el odio etc.
Qué lugar más arquetípico para el aislamiento humano podría ser si no las cuevas donde aparecieron las primeras pinturas. Para mí, no fueron chamanes, ni pinturas mágicas para la protección y la buena caza. La Creación existió para sobrellevar, de alguna forma, el absurdo y la locura humana. El alma necesitaba evadirse de la necedad».
Mario Sánchez
Mario Sánchez y Elena Bautista comparten una visión del arte como evasión, como una manera de hacer el mundo más bello. Los dos hablan de lo cotidiano, pero desde un prisma poético que nos invita a prestar atención a los detalles y a las sensaciones que muchas veces pasan desapercibidas.
Son dos libros muy similares en el fondo pero contrapuestos en la forma.
Al otro Lado es un libro muy femenino, etéreo, liviano, para dejarse flotar entre sus versos libres. La Piedra Voz es un libro masculino, rotundo, primitivo, con sonido a percusión. Dos modos diferentes pero complementarios de entender la poesía.
