Glaugnea es un idioma artificial inventado por el poeta Michael Helsem para poner nombre a lo innombrable (“Solo los más rudos contornos de nuestras experiencias son comunicados por los idiomas existentes”).
Consistía en lexicalizar en una sola palabra sentimientos complejos, sensaciones mágicas o ideas abstractas.
La intención parece que era enriquecer el mundo interior a través del vocabulario, basándose en la idea de que el lenguaje es el medio que hace posible el razonamiento, ya que si no sabemos hablar de algo, es como si no lo entendiésemos.
Estos son algunos términos de este idioma mágico:
–eenluce= un juego cuyas reglas cambian constantemente.
–blixth= algo hecho por la belleza del acto, no para ningún significado o utilidad.
–imnaev = Cuando a nadie le importa lo suficiente como para hacer algo…
–meebzink = el chirrido de pelo limpio y húmedo.
–delk = pensar en un chiste y no utilizarlo.
–folps = revertir al propio acento original en una situación estresante.
–hurbkun = acostumbrarse a la confusión.
–tongganox = ver llover desde un lugar seco.
–selhay = lo ignorado por no ajustarse a nuestros supuestos o ideas preconcebidas.
¿Verdad que es necesario un idioma así?